Cuando él calló, ella lo miró fija y detenidamente diciendo:
―Si miras más allá de ti mismo y tu conveniencia, te darás cuenta de que eso que crees llamar beneficio no es más que un confite lleno de hormigas, la honradez está o no está, no hay intermedios, ¿le pusiste precio?
―Dices no ser el primero, pero piénsalo dos veces, eres el único y porque te estimo te diré algo, una decisión tienes por delante, asegúrate de que sea la correcta.
Saliendo de la oficina se detuvo y añadió:
―Tómalo o déjalo, esa también es tu decisión.
Elenny Hernández